lunes, 10 de noviembre de 2008

Jerga de rufianes

Hemos hablado varias veces en este blog de la claridad idiomática, de la claridad de pensamiento y expresión que, a nuestro juicio, deben caracterizar a todo comunicador, sea periodista, animador de radio o televisión, escritor, filósofo, cineasta…
Consideramos de interés citar parte de un capítulo del divertido libro “Filosofía para bufones”, de Pedro González Calero, ilustrado por Anthony Garner y editado en 2007 por Ariel, S.A. (colección Claves), Barcelona.
González Calero -no es ésta la primera vez que lo mencionamos- recuerda en un capítulo de su libro que Walter Benjamin, bastante más radical que nosotros, llamó “jerga de rufianes” a la manera de explicarse de una buena parte de los filósofos del siglo XX. (En el siglo XXI hay muy pocos, ¡ay…!)
El autor de “Filosofía para bufones” dice, a su vez, que “cuanto más difícil de entender parezca el pensamiento propio, más profunda resultará a los ojos del vulgo y más autoridad confiere al pensador. Además, ¿qué iba a ser de los aduladores de la doctrina del maestro, si no pudieran especializarse en la disciplina de descifrar sus palabras?”
González Calero, madrileño, de 45 años, es soltero, sin hijos, republicano y ateo. Profesor de filosofía, ha recogido anécdotas humorísticas de grandes filósofos y coincide con Bertrand Russell en que “todo acto de inteligencia es un acto de humor”.



© José Luis Alvarez Fermosel

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