En este mes se cumplieron 70 años del estreno de la película cumbre de Orson Welles, El Ciudadano (“Citizen Kane” en inglés), que año tras año se sitúa a la cabeza de las 100, las 20, las 10 mejores filmadas en todo el mundo desde el nacimiento del cine.
Se ha llegado a calificar El Ciudadano de epopeya, lo cual parece un poco exagerado.
También recibió algunas críticas. Quizás la más lapidaria y la más conocida, por tratarse de quien la formuló, fuera la de Borges, quien dijo en la revista Sur de Victoria Ocampo: Me atrevo a sospechar que “Citizen Kane” perdurará como perduran ciertos films de Griffith o Pudokin, cuyo valor histórico nadie niega, pero que nadie se resigna a rever. Padece de gigantismo, de pedantería, de tedio. No es inteligente, es genial, en el sentido más nocturno y más alemán de esta mala palabra.
Años más tarde rectificó y le dijo al crítico de cine uruguayo Alvaro Sanjurjo Toucón, en la revista Noticias de Uruguay, que la suya había sido una crítica muy injusta y que la película en realidad era excelente.
Welles revolvió el avispero durante toda su vida, o una buena parte de ella, desde su Guerra de los Mundos hasta la acusación, según La historia oculta del asesinato de la Dalia Negra, de haber matado con sus propias manos a la Dalia Negra en cuestión, la joven Mary Pacios, una estrella que aspiraba a colocarse en el firmamento de Hollywood.
La nota relacionada de Pablo de Vita, muy documentada, habla largo y tendido en la revista ADN Cultura del diario argentino La Nación de El Ciudadano, Orson Welles y otras cosas muy interesantes relacionadas con la película y su director. Hay que leerla.
© J. L. A. F.
Nota relacionada:
Orson Welles sigue en el centro de la escena
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También recibió algunas críticas. Quizás la más lapidaria y la más conocida, por tratarse de quien la formuló, fuera la de Borges, quien dijo en la revista Sur de Victoria Ocampo: Me atrevo a sospechar que “Citizen Kane” perdurará como perduran ciertos films de Griffith o Pudokin, cuyo valor histórico nadie niega, pero que nadie se resigna a rever. Padece de gigantismo, de pedantería, de tedio. No es inteligente, es genial, en el sentido más nocturno y más alemán de esta mala palabra.
Años más tarde rectificó y le dijo al crítico de cine uruguayo Alvaro Sanjurjo Toucón, en la revista Noticias de Uruguay, que la suya había sido una crítica muy injusta y que la película en realidad era excelente.
Welles revolvió el avispero durante toda su vida, o una buena parte de ella, desde su Guerra de los Mundos hasta la acusación, según La historia oculta del asesinato de la Dalia Negra, de haber matado con sus propias manos a la Dalia Negra en cuestión, la joven Mary Pacios, una estrella que aspiraba a colocarse en el firmamento de Hollywood.
La nota relacionada de Pablo de Vita, muy documentada, habla largo y tendido en la revista ADN Cultura del diario argentino La Nación de El Ciudadano, Orson Welles y otras cosas muy interesantes relacionadas con la película y su director. Hay que leerla.
© J. L. A. F.
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