miércoles, 12 de septiembre de 2007

El macho posmo gastronómico




Cocina, modos y lenguaje posmodernos

La cocina, cocinar -sobre todo en televisión- es hoy en día una moda: una más de esta sociedad posmoderna tan esnob de los prolegómenos del siglo XXI que se caracteriza, entre otras cosas, por el mal gusto: confundir la moda que no vive más que de cambios con lo hermoso que perdura. Dijo Stendhal.
Los cocineros, que ahora son “chefs” o jefes, diseñan platos en eventos, restós y frente a las cámaras de televisión buscando el maridaje de la preparación con el vino, que ha de ser varietal, si es posible bivarietal y, en cuanto a los tintos se refiere, de color púrpura.
Los cocineros mediáticos aderezan sus explicaciones con la memez del posmodernismo. Dicen emplatar en vez de servir o pasar al plato y realizar por guisar, cocinar o preparar: realizar un estofado, por ejemplo; es decir, un estofado no, que es muy vulgar: una “blanquette”.
Nada está bueno o es rico; todo es… interesante. Las verduras son vegetales, traducción literal del inglés “vegetables”. Las ensaladas son “salads”, también en inglés y se aliñan con aceite de oliva extra virgen y aceto balsámico de Módena. Lo que pica no es picante sino picoso. El puré de papa es papa batida, “… que es más cheto” (sic).
Lo que se va a preparar, o sea, elaborar, es… la idea. A las viandas hay que tratarlas con cariño o más aún, con mimo. (Mimo, mimo, mucho mimo, susurran los muchachos mientras acarician con ternura echalotas, puerros, nabos y zanahorias).
El sentido posesivo de estos cocineros se patentiza cuando hablan de nuestro pato o nuestra boga.
Convertir algún alimento en crocante es crocantizar. Jamás dirán añadir ni incorporar sino agregar, que suena más fino a sus oídos. Estar a dieta es adietarse. Y los programas están guionados.
Tanto manierismo y, sin embargo, algunos de estos “chefs” tan “cool” dicen querramos por queramos, crosta por costra, medias hechas -las perdices, por caso- en vez de medio hechas, mucho hambre en lugar de mucha hambre, aprete por apriete y hubieron por hubo.
Los muchachos “trendy” han tomado los fogones como quien toma la Bastilla.
Señoras con delantal en sus casas y señores con gorro blanco en hoteles y restaurantes cocinaban antes lentejas con chorizo, mejillones a la provenzal, canelones a la Rossini y otras exquisiteces que ahora son "delikatessen".
Todos llamaban a las cosas por su nombre, hablaban correctamente, eran discretos, concretos, sencillos y carecían de afectación y rebuscamientos.
Ah, un día de estos tenemos que hablar de la cocina molecular.

© José Luis Alvarez Fermosel

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola, Caballero: En mi familia todos estamos contentísimos de que
se esté ocupando del macho posmo de nuevo.Ud indicó por radio una película francesa sobre el tema. No nos recordamos del nombre pero no importa. La vimos y era tal como ud la había contado.Que personajes! Y con lo de la comida, es de terror! Es imposible ya hasta escucharlos, con eso de los cariñitos parecen babosos. Nosotros no tenemos hijos pero a falta de ellos, tenemos sobrinos que pasan los 30 largos. La mayoría tiene tics de niños de 6.Cosa de no creer. Lo felicitamos. Ud nos hizo abrir los ojos con esta situación. Flía. Alonso de Tigre.

Anónimo dijo...

Fermosel: tengo un hijo de 41 años, no le miento. Prefirió estudiar para chef.Hoy no encuentra laburo porque cuando va a ofrecerse a un restaurante el dueño le ordena lo que tiene que hacer. Eso no le gusta. Cree que si no lo toman como jefe lo deberían tomar como asesor pero meter las manos en el agua y cocinar, no. Que tiempos!

Anónimo dijo...

A la familia Alonso de Tigre: El título de la película es "Tanguy".Decís bien: ¡qué tiempos!. Gracias.

Anónimo dijo...

britos: como decía en un mensaje anterior: ¡qué tiempos! Pero ten paciencia. Tu hijo no tiene más que 41 años. ¡Es una criatura!

Anónimo dijo...

ud. lo dice bien, es verdad. ¡qué manejo de los nabos y las zanahorias! Pero cómo no iba a ser así, si ellos/as lo son. ¡Qué época! diego, de moreno.

Anónimo dijo...

Dices bien,Diego.¡Qué época,tan rica en nabos...!