martes, 6 de octubre de 2009

Otra vez la huevada

Anda uno paveando por ahí: leyendo, escribiendo, yendo al cine, al teatro, aprendiendo Krav Maga (leer nota relacionada), encontrándose con buenos amigos y hablando de esa cosa maravillosa que es la vida…; y, claro, no se entera de que, en broma en broma, ya estamos otra vez en plena Semana Mundial del Huevo.
Ya en otra ocasión hablamos de este… evento, que concita, año tras año, la atención de muchísima gente en todo el mundo y se festeja a bombo y platillos.
A uno, y uno cree que esto lo ha dicho ya en otras semanas del huevo, le parece que esa buena gente, aquí y en Pekín, está verdaderamente en lo que tiene que estar y le da importancia a las cosas que la tienen, como hacer huevo, y no las tonterías que hace uno.
El huevo está ahí, desde siempre. Lo ponen las gallinas por la mañana, bien tempranito. Lo retira alguien que lo instala enseguida en el mercado y el huevo termina en nuestra mesa y nos lo comemos, a veces frito con jamón igualmente frito.
¿Justificará ese proceso del huevo, tan natural y tan trivial como tantos otros de la vida diaria, que se organicen todos los años simposios, mesas redondas, conferencias, discursos y se elaboren informes, se preparen tesis doctorales y se escriban ensayos y se muevan ciento de miles, si no millones de euros para organizar y celebrar una semana mundial del huevo?
El nueve de octubre se festeja el Día Mundial del Huevo, como culminación por todo lo alto de la Semana Internacional del Huevo, que este año comenzó el cinco de octubre.
Parece que en Argentina se comen muchos huevos. Cada habitante de este país se embauló 126 huevos en 2002. En 2009 se habrán consumido 210 huevos por persona. Que dato interesante.
Hace poco, comer huevos era malo. Los dietistas decían que la yema, sobre todo, engordaba y que, además, aumentaba la concentración de lípidos, o sea, de grasa en la sangre. Los mismos dietistas -probablemente asesorados ahora por hueveros- aseguran que no hay alimento más sano.
¡Es una cuestión de huevos!


© José Luis Alvarez Fermosel

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